Bernal, reconocido como uno de los Pueblos Mágicos de México, es un destino único, ideal para descansar de la rutina y nutrirse de su energía. Es relativamente pequeño, por lo que podrás aprovechar un fin de semana y recorrer la ruta del vino y visitar sus famosas tiendas de artesanías. Desde todos los rincones del pueblo, podrás apreciar la imponente Peña de Bernal que -según cuenta la leyenda- es una fuente natural de energía.
La Peña (la montaña) es la gran protagonista de Bernal. Cuentan los habitantes que es una fuente de energía y ¡no hay mejor forma de comprarlo que subiendo! Puedes hacerlo solo o en compañía de un guía. Te recomendamos la segunda opción para que puedas conocer las características e historia del monolito, así como la flora y la fauna autóctona.
Si eres amante del vino, Bernal y sus viñedos te alucinarán. Se destacan la Finca Sala Vivé con su impresionante cava a 25 metros de profundidad y Viñedos Azteca, con su hermosa hacienda de campo. Te recomendamos comprar un vino queretano, destaparlo y hacer un exclusivo picnic con el acompañamiento de alguna exquisitez local.
No puedes irte de Bernal sin probar las gorditas de maíz quebrado. Podrás distinguir esta delicia queretana por ser particularmente ligera y crujiente debido a que es elaborada con un maíz especial. Otras exquisiteces de la cocina queretana son los nopales santos (si son en tortilla azul mejor) y las tradicionales enchiladas serranas con cecina.
Bernal es el lugar ideal para pasar un fin de semana. Además, al estar camino a Sierra Gorda, puedes combinar ambos destinos.